Kingdom Animalia / Phylum Chordata
Clase Aves / Orden Falconiformes
Familia Falconidae
Falco naumanni
Cernícalo primilla / Lesser
Kestrel
Polluelos de
cernícalo primilla nacidos
en mayo de 2006 en la Alhambra
Tamaño máximo: 30 cm Hábitat
Prefiere espacios con alturas que les sirvan de
atalayas, cercanos a zonas urbanas. Está
asociado a territorios esteparios, grandes
cultivos de secano, cortijos y lugares donde
pueda refugiarse y otear grandes extensiones de
campos, pero también tiene una especial
predilección por construcciones urbanas
tradicionales, desde castillos, almenas y
barrios antiguos con grandes pendientes, como la
colina de la Alhambra en Granada y el barrio del
Albaicín, con grandes casas antiguas y
ajardinadas. En las últimas décadas se ha
adaptado a utilizar grandes edificios modernos,
con vistas hacia el borde de las ciudades y
grandes parques. Utiliza las construcciones a
gran altura como oteaderos desde donde divisar a
sus presas. Está incluido en el Catálogo
Nacional de Especies Amenazadas. Donde hay más
poblaciones es en Andalucía y Extremadura, con
un 50 y 30% respectivamente.
El cernícalo primilla, que hace unas décadas
había experimentado una grave regresión en sus
poblaciones, ha incrementado su presencia en
territorios del sureste de Andalucía. Censos
realizados por equipos de SEO BirdLife, han
comprobado el crecimiento poblacional, sobre
todo en espacios donde se mantienen los cultivos
de secano tradicionales, y aún quedan grandes
cortijadas en las que estas aves encuentran
refugio y un lugar donde anidar.
El cernícalo primilla, Falco naumanni, puede
considerarse como el halcón nazarí, ya que hay
datos que indican que era una de las rapaces más
comunes en el interior de la fortaleza de la
Alhambra, donde fue reintroducido hace algo más
de una década.
Los polluelos de cernícalo primilla que nacieron
en la torre de las Cabezas en las murallas de la
Alhambra, fueron la avanzadilla de una
reconquista que ha dado sus frutos. Las primeras
crías de Falco naumanni que nacían en las
atalayas nazaríes después de más de un siglo de
ausencia, pusieron las bases para que esta
especie haya logrado la reconquista de sus
territorios ancestrales en la provincia de
Granada. Cortijos abandonados y tajos cercanos a
cultivos y zonas habitadas, vuelven a ser
sobrevolados por esta rapaz de tamaño medio que
se caracteriza por poder detenerse en vuelo,
como si de un helicóptero se tratase, para
avistar y lanzarse sobre sus presas: reptiles,
pequeños roedores y grandes insectos, sobre todo
saltamontes. «En los últimos dos años hemos
detectado un gran incremento de colonias de
cernícalo primilla en toda la provincia de
Granada, donde se han podido multiplicar por
cinco las poblaciones que había hace menos de
una década», afirma el responsable de censos de
la Sociedad Española de Ornitología en Andalucía
y Granada, Juan Francisco Jiménez, que junto a
grupos de especialistas y voluntarios, realizan
censos de aves reproductoras y aves esteparias
entre las que han estudiado a los primillas.
La
reconquista
de los ‘primillas’ Cortijos abandonados, dehesas, tajos y
atalayas nazaríes
se han convertido en centros de cría que
investigan especialistas
de la Sociedad Española de Ornitología
Reportaje publicado en IDEAL el 22 de abril
de 2014
Por Juan Enrique Gómez y Merche S. Calle
/ Waste / IDEAL
Los polluelos de cernícalo primilla que hace
ocho años nacieron
en la torre de las Cabezas en las murallas de
la Alhambra, fueron la avanzadilla
de una reconquista que ha dado sus frutos. Las
primeras crías de
Falco naumanni que nacían en las atalayas
nazaríes después
de más de un siglo de ausencia, pusieron las
bases para que esta
especie haya logrado la reconquista de sus
territorios ancestrales en la
provincia de Granada. Cortijos abandonados y
tajos cercanos a cultivos
y zonas habitadas, vuelven a ser sobrevolados
por esta rapaz de tamaño
medio que se caracteriza por poder detenerse
en vuelo, como si de un helicóptero
se tratase, para avistar y lanzarse sobre sus
presas: reptiles, pequeños
roedores y grandes insectos, sobre todo
saltamontes. «En los últimos
dos años hemos detectado un gran incremento de
colonias de cernícalo
primilla en toda la provincia de Granada,
donde se han podido multiplicar
por cinco las poblaciones que había hace menos
de una década»,
afirma el responsable de censos de la Sociedad
Española de Ornitología
en Andalucía y Granada, Juan Francisco
Jiménez, que junto
a grupos de especialistas y voluntarios,
acaban de iniciar las investigaciones
para elaborar un nuevo censo de aves
reproductoras tanto en Granada como
en el resto de España, trabajos que se
desarrollarán entre
2014 y 2017, en el que los datos sobre las
colonias de cernícalos
primilla han sido de los primeros en
constatarse, ya que estas aves están
entre las que más pronto vuelven de sus
migraciones de invierno
en busca de lugares donde nidificar y
reproducirse.
Un grupo de voluntarios de SEO/Birdlife,
comprobaba la presencia de
una numerosa colonia de ‘primillas’ en un
cortijo semiabandonado del municipio
de La Malahá. Una veintena de cernícalos
sobrevolaban los
tejados casi derruidos. Tienen sus nidales
en el interior de los huecos,
entre las tejas, donde en pocos días podrá
comprobarse la
presencia de polluelos. «En años anteriores,
en este mismo
lugar, podíamos ver dos o tres parejas, y
ahora hemos contado hasta
quince, igual que en otros puntos de la
provincia de Granada, donde el
ecosistema es similar, es decir, grandes
extensiones esteparias, con mezcla
entre dehesa con olivar y cereales, donde
hay diferentes alturas y algún
lugar donde refugiarse para construir los
nidos, como son los cortijos
abandonados». Han detectado otras colonias
como la de Castillo de
Tajarja con 9 parejas.
15 años en la Alhambra
Los cernícalos primilla eran habituales de
la Alhambra en el
siglo XIX, pero desaparecieron. En el año
1999, una iniciativa del
Patronato de la Alhambra, inició la
reintroducción de la
especie con varias parejas para comprobar su
viabilidad. En 2002 se ubicaron
dos parejas reproductoras y continuó la
labor de suelta de juveniles
en diversos puntos. Durante unos años los
primillas volaron sobre
la Alhambra, y en 2006 nacieron los primeros
polluelos de parejas que anidaron
por sí solas y garantizaron la continuidad
de la especie en el monumento.
Estos polluelos son los que iniciaron
colonias en otros puntos del monumento
y de la provincia, sobre todo en la comarca
del Temple. Ahora, en la Alhambra
nacen entre 20 y 30 polluelos cada
año.
Cortijos como ecosistemas
Los viejos cortijos abandonados se han
convertido en ecosistemas en
los que habita una muy particular fauna y
ayudan a la regeneración
de las especies. En viejos caseríos anidan
cernícalos primilla;
son hábitat de mochuelos y lechuzas, las
golondrinas hacen sus nidos
en las cornisas y todos aprovechan la
derruida construcción como
refugio y lugar de caza, porque también hay
roedores y reptiles.
Cernícalo primilla, la rapaz de la
Alhambra
Parejas de Falco naumanni vuelven a
anidar y criar en las almenas
del monumento nazari
Por J. E. Gómez (texto y fotos)
- Waste
Junio 2006.- Son pequeños, sólo tenían 20
días
de edad, aún lucían el plumón blanco que
se les caerá
para dar paso al plumaje definitivo. Son
polluelos de cernícalo
primilla (Falco maumanni). Nacieron en los
nidales artificiales instalados
en la Torre de las Cabezas, en la
Alhambra, la fortaleza roja nazarí,
en pleno corazón de la ciudad de Granada.
Constituía una
buena noticia para el mantenimiento de la
biodiversidad de la isla ecológica
que forma el monumento dentro del casco
urbano de la capital. El nacimiento
ratifica definitivamente la vuelta de esta
especie a las almenas del monumento
nazarí.
La directora del Patronato de la Alhambra, el
órgano gestor del
monumento, Mar Villafranca, se sentía
especialmente satisfecha.
«El hecho de que podamos constatar la
presencia de unos 40 ejemplares
adultos cada año en el monumento significa que
se ha recuperado
la presencia de una especie que estaba
documentada desde el siglo XIX y
que, desgraciadamente, desapareció», dice
mientras se procedía
a anillar a algunos de los polluelos
«naturales de la Alhambra»,
comenta.
Estos polluelos nacieron en cuatro nidos
artificiales que se habían
habilitado en una torre alejada de la zona de
visita turística,
con la altura suficiente para convertirse en
hábitat de un ave rapaz
y preparados para evitar el acceso de
depredadores.
El cernícalo primilla es un ave que puede
considerarse urbana,
siempre ha habitado junto a poblaciones
humanas, y además es de
carácter filopátrico, es decir que
consideran como suyo el
territorio donde nacen o se desarrollan, por
lo que es lógico pensar
que para estos polluelos, la Alhambra será
su lugar de desarrollo
y, cada año, tras migrar al África
subsahariana, volverán
a la Alhambra, como ya lo hacen sus padres,
desde que en 1999 se reintrodujeron
los primeros ejemplares de este ave en las
torres nazaríes. Fue
en 2002 cuando se instalaron las dos
primeras parejas reproductoras, sesenta
años después de su desaparición de este
hábitat.
Los ornitólogos que ayer procedían a
anillar a los polluelos
llevan varios años siguiendo la evolución de
los cernícalos
en el monumento. Afirman que desde que
comenzó el programa de reintroducción,
se han soltado 229 pollos de cernícalo
primilla en esta zona, de
los que el 27% se ha comprobado que
volvieron a la Alhambra tras sus
migraciones.
Parejas estables
En 2006 se constataba la permanencia de
entre siete y nueve parejas
reproductoras. Seis de ellas han anidado en
la Torre de las Cabezas, y
otra prefirió hacerlo en agujeros situados
en la torre de la iglesia
de Santa María de la Alhambra.
También se ha constatado que algunos de los
polluelos que fueron
soltados en la Alhambra hace unos años, han
constituido colonias
y se han emparejado en otros territorios de
la provincia de Granada, como
la comarca de El Temple, en Alhama y en la
Vega de Granada.
Los polluelos nacidos en el monumento no
esperaban ayer la visita de
biólogos y periodistas. Los adultos
escaparon ante la presencia
humana en la torre. Desde el cielo lanzaban
sonidos de protesta, y los
polluelos, asustados, se dejaron manejar por
los expertos, que les trataban
con mimo, no en vano son, por derecho
propio, nacidos en la Alhambra.
El primilla vuelve a la
Alhambra La Junta y la Sociedad Protectora de
Animales reintroducen el ave
de presa
El cernícalo primilla vuela a sus anchas
sobre los palacios
nazaríes, como en otros tiempos. La
catalogación de la Alhambra
como Patrimonio de la Humanidad ha permitido
la reintroducción y
una adecuada protección para esta ave de
presa, en riesgo de extinción,
que se encuentra así a salvo de la caza
ilegal y del expolio de
nidos.
Por Rafa López / Ideal (Reportaje
publicado en 2004 con
motivo de las primeras experiencias sobre
reintroducción del cernícalo
primilla en la Alhambra)
CADA día, a las ocho de la mañana, el biólogo
Manuel
Martín se planta en la torre del Capitán,
dentro del recinto
monumental de la Alhambra, para alimentar y
comprobar el estado de los
cernícalos primillas que tiene a su cargo.
Este tipo de ave habitó
tradicionalmente en los bosques y jardines de
la Alhambra, con sus nidos
construidos en las oquedades del monumento. La
especie, una de las de presa
más actractivas, era hasta la primera mitad de
este siglo la rapaz
más abundante de Europa, mas el uso de
plaguicidas, el abandono
de los cultivos tradicionales de cereales, la
eliminación de huecos
propicios para la nidificación, la caza ilegal
y el expolio de nidos
acabaron por liquidar al 90% de estos
animales. En el caso del monumento
granadino, las cacerías llevadas a cabo en
esos años hicieron
que el cernícalo desapareciese por completo.
Pero ahora el primilla
ha vuelto a la Alhambra.
Un proyecto de la Sociedad Protectora de
Animales, la Consejería
de Medio Ambiente de la Junta y el Patronato
de la Alhambra ha logrado
la reintroducción del ave en el conjunto
monumental, de donde nunca
debió salir. Un largo trabajo previo de
investigación ha
concluido que esta iniciativa es viable. «Se
trata de abordar proyectos
factibles, pues no basta simplemente con ideas
románticas. Y hemos
comprobado que el plan es posible», indica
Antonio Rojo, presidente
de la Sociedad Protectora de Animales. El
delegado provincial de la Consejería
de Medio Ambiente, Rafael Salcedo, agrega a
eso la necesidad de velar por
la supervivencia de la especie, declarada en
peligro de extinción
y que ofrece un interés especial.
'Hacking'
El primilla gusta de comer musarañas, así
como lagartijas
o ratones. Pero su manjar predilecto son los
saltamontes, de los que cuenta
en abundancia en la Alhambra y sus
alrededores. A las facilidades para
satisfacer su dieta, se suman otros
elementos favorables para que la
reintroducción
en la Alhambra resulte exitosa: clima
mediterráneo, relieve no excesivamente
inclinado del terreno -secanos del
Sacromonte, la vega, y cultivos propicios
en La Zubia, Armilla o Las Gabias, adonde se
desplaza el primilla para
alimentarse-, buenos lugares para nidificar
en el monumento nazarí
y ausencia de otras rapaces que pudieran
dañar su colonia.
Pese a que esos factores son satisfactorios,
el biólogo Manuel
Martín apostilla que era necesario otro para
completar el panorama:
crear artificialmente un ambiente de colonia
parecido al que debe existir
de forma natural. Y ello porque el primilla
es un ave gregaria, esto es:
requiere un padrino que cree en la colonia
un clima de sosiego y paz, y,
además, excite en los pollos el ánimo de
disputarse la comida.
La solución a este extremo ha sido la de
recurrir a la técnica
de hacking, es decir, de apadrinamiento. Los
padrinos son individuos adultos
irrecuperables a causa de las lesiones que
padecen y que se encontraban
en un centro de recuperación de especies
amenazadas.
Voladero
De esta forma, los seis adultos
utilizados fueron introducidos
en un voladero situado en la torre del
Capitán. La primera tarea
consistió en lograr que estos adultos se
adaptasen a su nuevo hábitat.
«Además de ser un método que incrementa
notablemente
la efectividad de las reintroducciones,
permite dar una alternativa digna
a estos animales adultos, que nunca podrán
ser devueltos a su entorno
natural», sostiene Manuel Martín.
Una vez adaptados estos animales
irrecuperables, el siguiente paso
fue el de colocar pollos de primilla -que
habían sido criados en
cautividad- en nidos anexos al voladero. Los
primeros son, de esta forma,
un reclamo para los segundos. La presencia
de los adultos hace que las
crías consideren poco a poco la colonia como
su nuevo hogar, con
lo que tras el primer vuelo, regresan a él.
El biólogo, por lo demás, se encarga de
proporcionar
alimento suplementario a los primillas hasta
que constata la independencia
de estos ejemplares jóvenes para obtener
comida por sí mismos.
A pesar de que los animales ya entran y
salen de los nidos con facilidad
y frecuencia, Rafael Salcedo y Antonio Rojo
consideran que todavía
es pronto para afirmar que la reintroducción
se ha conseguido plenamente:
será necesario aguardar un tiempo para
aseverarlo.
Por ahora, los animales presentan una
evolución favorable. «Se
les ve integrados y pletóricos», dice Rojo,
quien apunta que
la Silla del Moro, el cementerio y la propia
Alhambra conforman un territorio
ideal para la supervivencia -y, aún más, la
futura expansión
de la colonia- de esta variante de
cernícalo.
Los primillas vuelan otra vez sobre la
Alhambra. Es posible divisarlos
a cualquier hora del día sobre las cabezas
de turistas y de guías.
El monumento ha ganado un nuevo atractivo, y
van...
Maximum size: 30 cm
Habitat
They prefer high-up spaces they can
use as observation posts near urban
areas. They are associated to castles,
battlements or urban quarters with
high vertical surfaces, like the
Alhambra de Granada hill and the
Barrio
del Albaicín, with huge old buildings
with gardens.
They seek high-level positions where
to look down on prey hiding in
the vegetation.
They are frequent in cottages near the
farmlands and the hollows in
Doñana, and they can be seen in the
surroundings near the Coto del
Rey.
Fifty per cent of Lesser kestrels in
the peninsula live in Andalusia
and thirty percent in
Extremadura.
They are included in the National List
of Endangered Species.
VÍDEOS: Paisajes con Historia, es una serie
de reportajes para dar
a conocer rutas y parajes con cualidades
naturales y patrimoniales. Grabaciones
exclusivas de Waste Magazine. (Reportajes,
fotogalerías
y vídeos)
Nidales preparados
en la torre de Las Cabezas,
en la Alhambra
El
cernícalo primilla vuela a
sus anchas sobre los palacios
nazaríes, como en otros tiempos. La
catalogación de la Alhambra como
Patrimonio de la Humanidad ha
permitido
la reintroducción y una adecuada
protección para esta ave
de presa, en riesgo de extinción, que
se encuentra así a
salvo de la caza ilegal y del expolio
de nidos.
.
Nido en la
Alhambra